Hasta hace pocas décadas, a la entrada del parque de Los Llanos había unos carteles que decían:
Han pasado los años, desaparecido el cartel, y gran parte de nuestro patrimonio arbóreo lo hemos convertido en leña. La grafiosis, a principios de los 80, se llevó todos los olmos centenarios que formaban los ejemplares más soberbios de los árboles del parque.
Llegó el aire huracanado y, en febrero del 96, con sus 136 km/h. abatió, en Los Llanos, los árboles más corpulentos que quedaban.
Entre ellos se llevó "el árbol hueco" que durante generaciones alimentó el sentimiento erótico de los estelleses".
Extensas zonas del pinar de Santa Bárbara.
La mayor parte del pinar de la muralla de Elgacena.
Y los mejores ejemplares del Puy.
Como nuestro ayuntamiento no estaba satisfecho con la obra destructora de la naturaleza, acabó con los pocos ejemplares que quedaron en Elgacena. En julio del 96, sin motivo alguno la pala se llevó tres hermosos pinos que había en el Belviste.
El pasado año, un patán acabó con dos magníficos ejemplares de pino piñonero que había en San Jerónimo. Para hacer un nuevo puente de la Vía se derribaron chopos centenarios; más de los necesarios.
Y gracias a la intervención de quien esto escribe, se pudo salvar, hace unos veinte años, el precioso ejemplar de Juan de Labrit que el pasado año sufrió una desafortunada poda que prácticamente le dejó sin ramas una de sus horquillas.
